Por: Diego Espitia.
Al remontarme a los orígenes remotos sobre la creación de la urbanización Villa Claudia, perteneciente a la localidad de Kennedy, la percibo como un territorio que se fue haciendo como una especie de colcha de retazos en donde cada quien aportaba lo pertinente para ver la realidad que se vive hoy en día.
En el centro de su geografía, se encuentra ubicado el parque principal, el cual, como todo lugar público, que es de todos y de nadie a la vez, se va reinventando de acuerdo a las actividades que allí se desarrollan, como por ejemplo, la delimitación de una zona dentro del parque para llevar a cabo la construcción de escenarios deportivos técnicamente planeados (ojalá así sea), obra tal, que ha sido avalada por el propio Distrito. Pero ¿a qué va todo esto? No sé si es porque Gustavo Petro ya va de salida de su mandato local, que este despliegue de infraestructuras se están dejando ver en varios espacios públicos, pero qué necesario y eficaz sería aprovechar cada vez más este tipo de áreas para generar recreación y sana competencia, con el fin de mantener a nuestras comunidades ocupadas decididamente en acciones que cooperen para su bienestar físico y mental. Y no tener grandes terrenos en forma de parque, desproporcionados y desperdiciados, usados, en muchos casos, como basureros o sitios de consumo de drogas. Por tanto: ¡sí, a más inversión de este tipo que toca directamente la fibra de nuestra sociedad!
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